Lo que menos gusta de una golosina es el envoltorio, porque es la única parte que no se come. Mientras más rápido se pueda sacar, más rápido se va a llegar a la parte deliciosa. Sin embargo, el artista chino Ciro Wai decidió crear pequeñas esculturas aprovechando el envoltorio de los Ferrero Rocher. Los resultados son maravillosos y vamos a compartirlos con ustedes:
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Fuente: Bored Panda
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