En los años ’60, si le preguntabas a alguien que esperaba de la tecnología del futuro, lo más probable es que contestara sobre autos voladores. Y acá estamos en el año 2018, con comunicaciones inmediatas a cualquier lugar del mundo, acceso casi ilimitado a la información y teléfonos celulares con más velocidad y memoria de almacenaje que las computadoras que controlaron las misiones espaciales que llevaron a un ser humano a la Luna. Sin embargo, los autos siguen andando en el pavimento.
Ya hay varios proyectos donde se quiere generar autos con autonomía de vuelo, de hecho Uber está preparando prototipos de planeadores para transporte rápido. Sin embargo, la startup canadiense Opener quiere apurar la presencia vehicular en los cielos con BlackFly.
Este vehículo volador uniplaza se carga con electricidad y actualmente puede volar por 40 kilómetros a una velocidad de 100 km/h. Según sus creadores, sería tan sencillo de manejar que el usuario no debería sacar una licencia de piloto para usarlo.
Opener ha estado desarrollando el BlackFly por los últimos nueve años y ya han hecho 1.400 pruebas donde recorrieron más de 19.000 kilómetros. Si bien aún no hay una fecha de lanzamiento al mercado masivo, esperan que pronto sean parte del sistema de transportes canadiense.
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Fuente: Opener
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