Seguramente ya no necesites más motivos para encariñarte con tu mascota, pero la novedad es que ahora — más allá de tu amor- hay evidencia científica que demuestra que las personas con perros viven más años y con una mejor calidad de vida.
La clave está en el corazón
Los resultados de un estudio que se llevó a cabo en Suecia durante 12 años –y que abarcó a 3.4 millones de personas de entre 40 y 80 años- reflejan que los dueños de perros son menos propensos a sufrir enfermedades cardiovasculares.
Tuvieron 36% menos de problemas del corazón y 11% menos de infartos, en comparación a quienes no tenían a su lado al mejor amigo del hombre.
Por qué cuatro patas nos mejoran la vida
En primer lugar, estas personas solían hacer más actividad física, aunque sea caminar con el perro.
Expresaban un bienestar general mayor y mejor humor.
Además, los dueños de perros tenían un mejor sistema inmune y eran en promedio más resistentes a las alergias.
Justo aquí, en los sentimientos
El hecho de tener un perro, además, los hacía sentir más protegidos y acompañados. Esto reduce el estrés y -de nuevo- los riesgos asociados a este tipo de enfermedades.
Si bien tener cualquier tipo de perro marcaba la diferencia, esta era aún más notoria cuando provenía de una familia de caza (terriers, labradores y similares), históricamente compañeros de aventuras de sus humanos.
Por si necesitabas un motivo más para correr a abrazarlo.
¿Qué te parece?