1 Te sentís más atraído hacia ella

Esto no es más que una reacción química. Cuando tenés sexo, liberás feromonas y consecuentemente, por medio del olfato, esto se traduce como un aumento de la atracción para el sexo opuesto.

2 La ves más feliz

Además de que es algo super obvio el hecho de estar más contento cuando tenes una vida sexual más activa, un estudio realizado por la Universidad de Colorado mostró que cuánto más frecuentemente se de el acto sexual, más feliz vas a ser.

3 La ves más linda de lo normal

Durante el sexo, nuestro cuerpo pasa por muchos cambios. Principalmente hay dos cosas que suceden. La primera tiene que ver con la tensión muscular y la segunda con el incremento de flujo sanguíneo a todas las áreas del cuerpo. Unos cachetes sonrojados indican mejor salud y mayores niveles de estrógeno, hormona vinculada a la fertilidad percibida en mujeres. Así, entre otras cosas, las mejillas sonrojadas le indican a tu cerebro que ella es más atractiva sexualmente, por ende, más linda.

4 Sabés que durmió como un bebé

Las mujeres que llegan al orgasmo tienen un incremento de un 30% en la hormona prolactina. Y esta hormona es, entre otras cosas, la causante del mareo y puede ayudar a fomentar un sueño profundo. Así que cuando alguna mujer te diga que durmió como un bebé, es muy probable que haya tenido sexo la noche anterior.

5 No busca ser el centro de atención

El acto sexual libera oxitocina, una hormona que, entre otras cosas, ayuda a las personas a congeniar. Esta necesidad de congeniar se ve bastante satisfecha con la oxitocina que provoca el sexo, por lo cual no requerirá de mucha atención por parte de los otros. Estará bien y completa por sí misma.