1 El vestido de la cumplañera

¿Qué son esos colores? ¿Por qué tanto tul? No entiendo por qué te estás disfrazando de princesa de Disney. ¿Qué? ¿Era una fiesta de disfraces y nadie me avisó? Explicame ya qué haces con una corona en la cabeza. No sos Maxima Zorreguieta, ¿Te podés calmar?

2 Las fotos del book

Resulta que decidiste hacer un libro con todas fotos tuyas donde la gente no para de mencionar lo linda que estás y lo mucho que te quiere. Perdón, pero ese book va a terminar en un cajón y cuando lo abras 20 años mas tarde no te van a interesar las firmas de tu compañero que no te pasaba la tarea. Aparte, ¿Por qué posas así? No sos Paris Hilton, a mi no me engañás.

3 La foto en la mesa

Pará, hace dos minutos me estaba clavando un plato de sorrentinos, mirá si sonrío y me sale un pedazo de espinaca en un diente. Además ¿Qué cara pongo? Es obvio que tengo que salir más fea que la quinceañera pero no más fea que la más fea de la mesa.

4 El video con amigas

No hay mucho para decir. Ojalá ninguno, pero ninguno de ustedes pretenda ser actor.

5 La coreografía con amigas en el medio de la fiesta

Entiendo muchísimo que quieras ser el centro de atención porque es tu fiesta, pero nunca vas a ser como Britney. Todos aprovechamos estos momentos para ir al baño.

6 Las velas

Sonando “un amigo es una luz” de fondo: “Porque siempre estuviste en los peores y mejores momentos esta vela es para vos amiguis.” Bueno, muy tiernas las chicas, pero, ¿Se pueden apurar que son las cuatro de la mañana y ya es hora de la mesa dulce?

7 El carnaval carioca

Basta, por favor, pará esa música, son las cinco y media de la mañana y la cabeza no me da para más. Aparte ¿Qué somos? ¿Brasil? Dejen de abrazarse y cantar “somos los piratas” porque mañana vuelven a ser todos sometidos de sus esposas. ¿Quién te pensás que planchó la camisa que tenes puesta?

8 El trencito

Esto es horrible. No me tironees el brazo ¿No ves que no me quiero sumar? Aparte siempre terminás entre dos viejos que te agarran la cintura. Señor, podría ser su hija.

9 El cotillón

Ya la palabra cotillón me parece horrible. Nadie te quiere ver con una flor en la cabeza o con maracas en forma de frutas color metalizado. Encima no se por qué pero siempre terminás llevándote un montón de sombreros y cosas a tu casa que no vas a usar nunca, nunca más.

10 La mesa dulce

Hermocícima con postre bariado!!!!¡¡ En sí la mesa dulce es un golazo desde mitad de cancha minuto 44 del segundo tiempo, pero no banco para nada el horario. A esta hora ya comimos todo lo de la recepción, la entrada y el plato principal. Disculpame, pero a no ser que quieras que entre a cuestión de peso, esto no está nada bien. Será cosa de clavar tupper y llevar cosas pa’ casa.

11 El souvenir

No podía faltar. Los souvenirs realmente no sirven para nada. ¿Qué hago con esto en mi casa? Es tan feo que ni de pisa-papeles sirve. Por favor, no gastes plata en este tipo de cosas porque de todo corazón, son feas y van a terminar en un tacho.

Bonus Track

Esta bien, en este artículo hay muchas quejas, y para que no piensen que soy una persona amargada acá les dejo dos videos sobre este tema que me hicieron muy feliz.

Como rebalsa la pileta, me enloquece.

La mejor parodia con respecto a las fiestas de quince. Hay que admitir que en un principio todos pensamos que esto era real.