Si te pareció increíble el lanzamiento del helado de Cheetos, tenés que saber que no es el único: alrededor del mundo hay inventores de sabores que dejaron muy lejos las dos bochitas de vainilla y chocolate.
Entre ellos, hay toda una rama que considera una muy buena opción combinar la base del helado con algún tipo de carne. Estos son algunos de ellos:
Jamón crudo
Sí: prosciutto o jamón crudo combinado con higos es lo que rellena este inofensivo conito.
Lengua
Afortunadamente, el envase tiene un amable dibujito que nos advierte que este helado que nos estamos llevando es sabor lengua de vaca.
Pollo
Lamentamos llevarle la contra a Moria, pero el helado de pollo sí existe: más específicamente, de alitas de pollo y waffles.
Carne de caballo
En Japón se puede conseguir este helado que contiene trocitos de carne de caballo cruda.
Tocino
Por supuesto que si en Internet hay lugar para algo es para los gatitos y para el bacon.
Sardinas
Sólo para valientes: este helado combina sardinas y brandy.
Langosta
Fue creado por un restaurante especializado en frutos de mar (y, aparentemente, en la idea de no desperdiciar nada).
Serpiente
Carnes, dijimos, y para todos los gustos: en las góndolas japonesas se puede conseguir este aparentemente inofensivo potecito de helado de serpiente Mamushi.
Foie Gras
Porque, ¿a quién no le gusta el hígado del pato en su postre?
Akutaq
Sólo apto para paladares amplios, Akutaq es lo que se llama “el helado esquimal” y consta de una base de grasa animal (que puede ser reno, caribú y hasta ballena) combinada con frutos rojos.
¿Cuál te animarías a probar?
Fuentes: Vice, Clear99, Mental Floss.
¿Qué te parece?